Gracias a Dios

 


1998 05 05

 

Gracias a Dios

que un desligado hilo

deja oír tu voz

entre tanta algarabía

y desorden.

Pena es que escuches

truenos y relámpagos

amenizados de dulces…

Oh! así intento reverenciar

a quién más se lo merece.

Se lo merece

por apiadarse de un alma

triste y adormilada

tan lejos de ti

que duerme noche tras noche

contando las estrellas

que me separan de tu preciosa melena.

Gracias a Dios

que bell-o ingenio el móvil,

para que tú y yo

nos pudiéramos

encontrar entre tanta algarabía.

                        Mala no, peor… pero ahí  está

 

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