A la derecha una ola que lleva
1996 10 08
A la derecha una ola que lleva
la arena del mar hasta una orilla
limpia, serena; que acaricia suave
mi palma extendida.
A la izquierda otra ola que arrastra
las algas despiertas hacia una roca
abierta, oscura; que afilada, araña
las yemas de mis dedos.
Entre las dos: un mar, un océano
que crepita exaltado, que descansa adormecido,
unas aguas turbulentas en el fondo apagado;
alborotadas y temidas por las naves
que se otean a lo lejos.
Un alma cuerda
en un dios atolondrado.