El libertino



2011 01 11

 

No es por el título, ni el argumento…

Es el drama ocasionado,

el perfil de hombre alborotado que descansa

en su ansiedad apartándose de quien ama…

 

La búsqueda errónea de una culpa

donde nadie advierte más que perversión,

delicias y avaros sentimientos…

Donde otros encuentran motivos de envidia.

 

No soy él, ni si quiera en su monólogo final…

Soy el que trata de no morir en paz

en busca de de dejar de litigar en una guerra

que batalla a batalla le vence.

 

Soy el que no se rinde ante sus deseos

y solo, encuentra el nirvana

amarrado a una mano ficticia…

Que todo le da, en sus ensoñaciones.

 

Que todo le atrofia

ahora que consigue despertar

- ¡en buena hora! -

para saber que sólo fue

un maldito sueño…

otra vez.

 

Después de ver “El libertino”

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