ENREDADERA

La minuciosidad con que las gotas de rocío caen sobre su cabello y deslizan por su piel, una magia indefinible llegando a esas montañas suaves, nítidas y llanas que focalizan mi mirada, enturbian mi cabeza de neblina espesa que no deja otear el paraíso divino que deja entrever mis ojos. Quisiera navegar en su mar de rocío, adentrarme en la niebla, palpar con nitidez el sol de sus labios, dejarme acariciar por su presencia. 24 de enero de 1997 ... Mi versión actual es otra... ... ... Algo parecido a esto... ... ... La minuciosidad la debí perder entre las enredaderas de una noche de verano de mucha tormenta. ¿Viví tan rápido? No lo creo. Sólo que el frágil pasar del tiempo a hecho añicos mis sueños y acrecentado m...