Despidiendo la soledad

 


1997 05 26

 

Despidiendo la soledad

de este momento

recuerdo tus labios

acariciando mi boca…

 

Apagas la penumbra

cristalizando cada gota

de esta sedienta jornada

en que te recuerdo

tan cerca de mí;

que un veneno no mataría

mi corazón arropado

por el calor de tu pecho.

 

Despidiendo la soledad

de este momento

una mariposa roja

se alza en su primer vuelo.

 

Las nubes ceniza

cubres, transparentando

el cielo azulado

que las soporta.

…………….

Pero la soledad

me ahoga en un pozo

tan profundo,

tan lleno de realidades

que quizás tu magia

sea suficiente.

Entradas populares de este blog

Mil y una entradas

Una madre palestina

Reflexión sin pasión