Decidí abortar la semilla     

 


1998 02 02

 

 

Decidí abortar la semilla                               

que un día cuidé

con sumo cariño.

 

Acabó el sueño perenne

de vivir entrelazados

millares de sensaciones.

 

Cual otoño que sobrevuela

las copas de los árboles

se perdieron mil ilusiones;

mas, tus ojos brillaron

aquel día más que nunca.

 

Llegó el verano

y con él las ilusiones

 

 

Desde entonces soy feliz

al arrullo de tus ojos.

La pasión torno inocencia;

los besos cariñosos elogios;

las caricias a ternura…

Eternamente tuyo. Ángel

 

 

 

                       

 

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