Ya no sé ni que pensar

 


2008 01 11

 

Ya no sé ni que pensar,

ni me imagino en el trance

del cuerpo a cuerpo

dejándome llevar por el momento.

 

No sé si ahora he sido yo,

o es por mi aspecto desesperado

de alma errante, que ansía

el desahogo de una copa

y unas risas con sus amigos

a alta horas de la mañana

esperando que llegue por detrás

esa dulce miel que resbale

por mi cuello… un susurro,

un beso, que me hipnotice

hasta su lecho por que ella quiera,

por que los dos queremos.

 

¡Sueños! Por que realidad nunca.

Fallan los amigos unas veces,

o la copa demasiado cargada,

o el susurro me rompe los tímpanos,

o ella… que no está.

 

Lo malo, lo peor de todo

es que a ella la tengo

y es lo que más me falla,

es, posiblemente;

lo más difícil de todo.

 

 

 

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