Entonces apareció ella

 


2011 06 14

 

Entonces apareció ella

deleitándome con su presencia.

Absorbí cada palabra como

un águila ávida de presa…

 

No fue su canto de sirena

tan añorado, ni su repertorio

de sonrisas mal interpretadas

por mi efervescente ánimo.

 

Pero era ella,

¿qué más puedo pedir?

Quizás un milagro.

 

Un destello que ilumine

mis pasos hacia su sombra

y cobijarme en ella.

 

Pues sí, hoy va a ser jodido concentrarse... pero que me quiten lo baila'o...

 

Presiento un día maravilloso.

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