Tu apartamento
2023 11 25
Abrazado a calmantes, a bolsas de hielo,
a paquetes de tabaco, a antiinflamatorios,
a bacanales de café, a cuadernos con malos
versos,
a insomnios malparidos, a despertares
grotescos.
Abrazado a todo menos a ti.
Aunque realmente es a lo que me
acostumbraste
desde tu albedrío, desde aquel fuego
extinto.
Fuego en tierra ya inerte, seca, agrietada;
que no se terminó de plasmar más que en
malos versos
expuestos en un muro demasiado opaco
como para salir en las noticias de las dos.
La montaña rusa descarriló tantas veces
como desayuné en tu “maravillosa” taza de
reyes magos;
a millones de kilómetros de años luz el uno
del otro,
tan cerca, como un relámpago de su tormenta
Sólo quedan los odiosos versos para hacerte
inmortal,
estampas borrosas corriendo a toda
velocidad;
y mi muro transparente y puro... donde sólo
quedan páginas en blanco para desaprender
lo que tus borratajos hicieron con mi
boceto.
Te echo de menos, ¿y hace tanto de tu
último abrazo?
…
¡Ayy madre! Vengo de recoger a mi padre del
suelo, de saber que Alba quiere mi cuento de David el Gnomo, de saber que mi
hermana es un cielo, de comprobar que mi madre es la más fuerte (de mi mundo)…
y en lo único que pienso es en que me invites a tu apartamento, y pasar un rato
divertido contigo…
Igual sí que tienes razón, soy un enfermo…
Pero no un psicópata subclínico. Simplemente, un tipo que prefiere vivir el
momento de la mejor manera posible… No creo que te hiciera daño, incluso si me
lo pides; me afeitaría este bigote de Momenber, o compraría unos tirantes para
hacerte del fontanero SuperMario Bros…
Enfermo sí, pero de vivir la vida alegre,
como en los momentos a tu lado… Además, hace horas ya, leí el poema que me
regalaste en tu poemario…
Hoy toca Iván Ferreiro en Valladolid, tengo
ganas de verte y saltar a tu lado, aunque sea a la pata coja… ¡Salto!
Gracias, y perdona por mi insistencia estos
días… Será el frío, la niebla, Ferreiro o tú en enaguas en mi cabeza…
¡boooommm!
Tengo libre hasta las cuatro