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  No poder decir ayer: ¡Te siento tan cerca! Heló mi corazón Apagando de un latido Su ensordecedor ruido Que tambaleaban los muros Columnados de aquella Avenida por la que paseamos. Sujeté tu paraguas Y a lo lejos las gotas Lloraban alelíes y malvas Y yo sin poder murmurar A tu oído: Te siento tan Cerca que me confundo. Más dura fue la vuelta Mojando mi cabeza Las uñas de los muertos Que esa noche, como todas, Eran mis únicos compañeros.                           31-Mayo-1997    

  La sonrisa que acaricia Mi torpe mirada Que la pierde a la vuelta De la gran manzana Diluvia arco-iris En mi mente vacía De recuerdos, de vida. Corriendo, saltando Sorteando mil dificultades Buscando la oportunidad Puesta de sol O el tibio canto Del pájaro en la mañana Te veo, te admiro Y acaricia tu sonrisa Mi rostro vacío Iluminando arco-iris En mi mente repleta De pupilas; de sueños.                 27-Mayo-1997  

  Marcando mi cuerpo con la espiga verde de tu inocencia, desvela la túnica de la blanca luna la luz del nuevo día.   Acariciando tu mirada descubro la mirada perdida de las muñecas de cera y de rubíes que se esconden lejos de las manos de los niños, clavando en el cielo la sábana transparente de tus lindezas descubres entrecortada mi amarga perdición y yo, sin aliento me esconde con torpeza…   hasta que te difuminas.                           27-Mayo-1997  

  Érase una vez una belleza Érase una vez: tú Pintada a lo lejos, Vista por pequeños ojos Llorosos Que te llaman a gritos Érase una aurora Érase una mañana contigo Despeinada, en mi almohada Llorosa Que te invita a quedarte Érase una noche Érase una noche a tu lado Desperezando mi corazón Al arrullo del tuyo; Violento, Al sentirte tan cerca.                             27-Mayo-1997  

  Podría escribir actitudes, Reglas, principios o leyes. Prefiero escribir el sueño De una tarde lluviosa -en la que nos encontramos- Tumbo mi pálida Y cansada cabeza Sobre la almohada Rehogada por mi madre Hace unas horas. Mis ojos Tardan un día En recordar aquella tarde En que tumbados, Recostados a la orilla Del Bólgota, besamos Aquel paraíso Lleno de flores, Aromas, sedas, alegrías; Que era tu boca Alumbrando la mía Creo que después Me desperté por un sonido Violento, que no era más Que la dulce voz De mi madre Diciéndome que ya era tarde…                 ¿Para qué?                 27-Mayo-1997  

  1997 05 26   Despidiendo la soledad de este momento recuerdo tus labios acariciando mi boca…   Apagas la penumbra cristalizando cada gota de esta sedienta jornada en que te recuerdo tan cerca de mí; que un veneno no mataría mi corazón arropado por el calor de tu pecho.   Despidiendo la soledad de este momento una mariposa roja se alza en su primer vuelo.   Las nubes ceniza cubres, transparentando el cielo azulado que las soporta. ……………. Pero la soledad me ahoga en un pozo tan profundo, tan lleno de realidades que quizás tu magia sea suficiente.

  Ni siquiera su plumaje gris Oculta la belleza sonrojada De sus mejillas Ni siquiera un día gris Oculta los rayos fogosos del sol Que nos ilumina Ni siquiera una rosa negra Puede ocultar lirios blancos De su delicadeza.                           26-Mayo-1997    

  1997 05 25 Solitario un día quedaría, si los ojos de aquel pájaro que trina sonetos de amor perdieran su mirada en otra mirada. Podría soñar que es mi dios aquel pájaro; idolatrar la finura de su canto hasta el summum, creando alrededor de su figura una aureola de las más coloridas y hermosas flores silvestres. También sería bonito que ese pájaro atendiera solamente a mi mirada mientras que los otros mortales no pudieran escuchar el canto alimentado de amapolas que silva su blanco pico. Querría que fuese negro, con los ojos azules, fondo del cielo, y las patas verdes con membranas para poder nadar entre los árboles. Despistado estoy entre la pubertad de mis sueños y el despiadado atolondramiento de mi espíritu; mi cuerpo tampoco acompaña, se siente cansado, tierno; mientras que mi corazón es el epicentro del último terremoto de pasiones que ha ocurrido en tu pecho. Quizás no sepa que mis letras son vanas… Sigo soñando en un espíritu, posiblemente manso, que las tome como ...

  1997 05 25   Declararía un lema a todos los enemigos del destierro injusto de nuestra vida, prefiero encaminar mi apagada hora a cuestionar el cómo algunos llegamos a perder la vida por nuestra vida. Sólo cabe pensar que nuestras almas quizás no pueden aguantar el peso amargo del frío invierno berlinés en sus sudorosas y cansadas espaldas. También podría ser que el aire sutil que respiran sus llagas es tan soez y brusco que calcina –como el fuego las ramas- las esperanzas volátiles de vivir… Pero nadie prohíbe en este penoso y atolondrado mundo soñar con verdaderas hadas que agiten su varita al cielo y de la nada creen un firmamento. Nadie por ahora declara la guerra al sueño de soñar despierto cuando se clava su mirada; el destino ha creado este momento para que sea tu amada.

  1997 05 24   Una sonrisa y una dócil caricia de tus ojos un huracán seguido del murmullo que ciega mis oídos, un susurro, un grito que clama mi nombre al cielo, una serpiente y tú lamiendo el veneno en mi sangre. Un paseo, una charla sentados entre dos árboles, unas palabras y mi corazón diciendo que te quiero…                  A ser posible en silencio.

  Esperando la llegada De un seco otoño Descansé en aquel banco Perdido en el parque Despertome la hoja Tibia de un corazón roto Y no descubrí allí Más desolamiento; Todos los brillos Se confundían en colores Insólitos hasta ahora Para mis pupilas La centelleante fuente Iluminó mi cara Despertándola ciegamente De su letargo -¿Creo haberme Pasado de fecha?- En la cúspide De un frondoso árbol Alguien respondió Mi primera pregunta               24-Mayo-1997  

  Podría perder la inocencia Que cubría mi niñez, Podría también la luna Dejar de existir Podría amar una sola mujer Entre mis brazos, Podría la luna dejar de ser La luz de los enamorados                 24-Mayo-1997  

  Podía acariciar Con mis dedos Las yemas saladas De tus ojos Cuando al verme Partir hacia ella Volví mi cabeza A tus ojos. Podía sentir Latiendo la roca Clavada en tu pecho Mientras yo Desanublaba mi alma Al camino incierto Del destino. Podía haberme Quedado contigo Buscando algo Que se debe Encontrar solo, Podía quedarme En el cielo Y subir a un trono.                           24-Mayo-1997  

  1997 05 24   Descanso: bella palabra a la vez que monótona. En tu regazo guardo los tibios y secos pétalos que arranqué de aquel desierto, donde hoy, no queda nada. Silencio y tu voz dejando caer el suave aliento de tu boca en mi cerebro, gotita a gotita ¡Tan fresco! que creo verte en mi silencio. Un beso haciendo el amor con otro beso apoyados en el hombro de la luna llena que llorando espera que tú y yo compartamos nuestros besos con ella en completo silencio.

  En el nido De un colibrí Sintió mi cuerpo El atolondrado pavor Que sienten los polluelos Al salir de un nido. Escondido debajo Del terreno fertilizado De un camposanto Junto a mi amigo, Sentí la soledad. Acurrucado, dormido En el lomo de un oso -De esos que ya no quedan- Acaricié el calor Amable de los oseznos Deshaciendo mi cuerpo Embarcado en el tuyo Sentí el placer Enorme que acallan Los enamorados                             24-Mayo-1997  

  No creo en las sosas Comidas familiares Que hacen crecer en el amor Y confraternizar lo inconfraternizable No creo en los absurdos Convencionalismos occidentales Que desgastan tu imaginación Para trepar hasta la cima Tampoco creo en mí, Es tanta la incoherencia Que provocamos intencionadamente Por no pararnos a pensar Por no pensar esas cosas, Que creo de verdad; Satisfacen la insatisfecha vida De los presentes: mortales. Como estas proposiciones Malintencionadas que propongo En la sincera fraternidad con mi alma Que pide que odie la razón Sólo dos momentos al día -como las comidas- Luego, piensan que tal lo pasan Y si gustan, pues van y repiten. ¡Ésta corre de mi cuenta!                             18-Mayo-1997  

  1997 05 18   Completamente tocado en el ala izquierda que desvía mi barco hacia un naufragio lleno de torcidas callejuelas oscuras, esquinas malolientes con sabor a rosas, otoñales jardines con alfombras marchitas, salpicados cielos de laberintos estelares completamente desviado de un camino soso en el que mi cómodo trasero, se apalancó una tarde cansada llena de desganada apatía que desde aquel golpetazo en el ala izquierda ha aprendido sin quererlo a esquinar ágilmente los malos momentos.

  Suavizando el porvenir:             Te odio Diciéndolo educadamente:             Te juro que te odio. Resbalándome la mediocridad:             Te pisaría Y recogiendo la mierda             Te la agitaría Espero que lo entiendas             Gilipollas Si no te lo repito:             Te odio Haciendo tiempo a la calma             Capullo de mierda Te haré un regalo:             Más mierda Habiendo llegado de lejos             Te escupo Encima me fatigas ...

  Destapé el frasco De las esencias Más sutiles y melosas Y me encontré La rosa negra que perdí En lo alto de la luna, Aquella noche lluviosa En la que te subí a ver Acurrucada en la esquina, Repleta de amarguras. Me acuerdo muy bien Como la cuidabas Regándola de un llanto Tan sincero como oscuro, Tan saldo como amargo; Allí, tan lejos de mí Sin saber lo cerca Que estabas en mí. Luego te toqué el hombro Me viste y se abrieron Los párpados negros De la hermosa rosa Descubrieron perlas brillantes Todavía húmedas y saladas. Encontraste la rosa, Salada me la diste, Húmeda por su tallo Y de un color tan puro Que la luna guiñó sus ojos Antes de acunar tu sueño. Hoy destapé el frasco De las esencias, Tiene el mismo sabor, Tiene el mismo color, Conserva todos sus pétalos Aquella rosa negra que perdí Y que tú me devolviste Aquella noche que te fui a visitar.          ...

  1997 05 18   Desprecio todo aquello que no se apaga con más de un beso de aquella cara que te miró adueñándose de una parte pequeña de un latido, del alma desviada en volátiles trozos por este desierto mundo.   Cuando uno de esos pedacitos, se una con otro a lo mejor encuentro el sentido a la vida, por lo visto hasta ahora; insulsa y acomodada, que no merece ni un pequeño ápice de mi respeto.

  El suspiro de un cabello De la crin de un ángel Que aparece en la montaña, Desmelena apabullante El gris terciopelo de la noche Encierra las estrellas Entre rosas negras sin espinas Esperando la dulce hora En que su dios despegue En su velero de nubes Describiendo en su oleaje Bellas palabras, poemas enteros Dedicados a un ángel Que convirtió un día gris En el más bello océano de nubes.                           15-Mayo-1997  

  Puede que sea esto Lo que más quiero En este mundo Un día completo De alegrías extremas Y tristezas profundas Con un poco de amor Acompañado de ternura, Con dosis de alcohol Y un poco, bastante, de locura. Un beso, un adiós, Un te espero y un punzón Clavado en la espalda Detrás justo del corazón… Luego respiro profundamente, Exhalo alcohol, me desnudo Y creo desde entonces En el amor o el deseo…               8-Mayo-1997  

  1997 05 07 Había una vez un joven que no sabía lo que era la felicidad. Se documentó con libros especializados encontrados en grandes bibliotecas, escuchaba conferencias sobre el tema, impartidas por ilustres magistrados; escuchaba también a personas que, por todos es pregonado, son los entes humanos más rebosantes de ese don; vio documentos impactantes y electrizantes sobre el tema en cuestión. Buscó y rebuscó por los lugares donde todos, hasta los más desgraciados, habían encontrado la felicidad… Dos, casi tres años que pasaron en busca de la luz que iluminara la respuesta a tan fácil -aparentemente- pregunta… ¿Qué es la felicidad? ¿Puede tener hora o fecha? ¿Se puede haber sido capaz de esquivarla adrede?... No sé si me estaré equivocando al responderte: Que es verdad que hay que buscarla, que no hay que rehuir de ella, que tiene su hora con su día correspondiente, que tiene su momento… No sé si me estaré liando demasiado, sólo sé que ese joven – que ahora escribe esta m...

  1997 05 07   Buscaría perderme en un vaso de cerveza, ahogarme impunemente en el laberinto de tu boca. Soplar al horizonte para alejarte de mí, acariciar las olas y bajar la marea. Subir al firmamento y descolgar una orquídea, remar por la alameda deshojando las estrellas. Llegar a tocar a dios y darle un beso, ver un día la muerte y después sobrevivir. Me gustaría abrazarte y hacer surf por Antequera y darte un beso morena en una tarde de abril. Y sino puedo chiquilla me conformo con soñarlo ya habrá tiempo de bodas y de cazar colibríes ya habrá tiempo de perderse entre tus piernas locas y besar tu corola con noches de alelí ya habrá tiempo, y sino… ¡Qué les jodan! Soñé esta noche contigo y soy el tipo más feliz.

  1997 05 07   Buscaría perderme en un vaso de cerveza, ahogarme impunemente en el laberinto de tu boca. Soplar al horizonte para alejarte de mí, acariciar las olas y bajar la marea. Subir al firmamento y descolgar una orquídea, remar por la alameda deshojando las estrellas. Llegar a tocar a dios y darle un beso, ver un día la muerte y después sobrevivir. Me gustaría abrazarte y hacer surf por Antequera y darte un beso morena en una tarde de abril. Y sino puedo chiquilla me conformo con soñarlo ya habrá tiempo de bodas y de cazar colibríes ya habrá tiempo de perderse entre tus piernas locas y besar tu corola con noches de alelí ya habrá tiempo, y sino… ¡Qué les jodan! Soñé esta noche contigo y soy el tipo más feliz.

  Estando acurrucado en su sombra Acariciando su lindo perfume a azahar Descubrí como su presencia Desencadenaba cataratas de ira, Remolinos de niebla, Suspiros de aire ahogados Entre las sábanas de lino Y los cien pozos malditos En los que perdí. Ahora que se va, la siento.                           6-Mayo-1997  

  En la mañana de ayer Mientras despertaba De mi aletargado Suspiro nostálgico, Desplegué mis párpados Hacia la mirada De aquella niña desnuda, Acurrucada en su melena. Su iris dejaba ver El cielo abierto y vivo Que las cortinas tapaban Su piel, aún fría, Dejaba resbalar mis caricias Cual tupido velo Y un beso lento hizo Despertar en mí aquella noche                 6-Mayo-1997

  Desplegando mis brazos Llego a tocar los pétalos Que nacen en sus ojos Susurrando un te quiero Escucharía mi ronca Y entremezclada polvareda Sus labios se acercan Puedo sentir la humedad Y el olor a hierba fresca ¡Que cerca está!, ¿me duele! Respiro hondo. Fue hoy Cuando dejó caer su néctar En mis sensibles venas Desplegando un veneno Lascivo, que hace arder El único sentido Que quedaba vivo Después de tanta ilusión, Después de tanta espera.                           6-Mayo-1997  

  1997 05 02   Y una niña me sirvió de antídoto mágico.   Tan dulce fue el momento, reflejándose ante mi presencia, perdida ante mi mirada perpleja y abstraída en un punto indeterminado.   Creo recordar su gesto: impávido, distraído.   Me inspiró la alegría de un día más vivo, lejos de ti, allá donde comienza a sentir la piel el frescor a tierra mojada acariciando el limbo que separa las dos tierras.   ¡Acojonado!

  1997 05 02   Alejada dos leguas de mi cuerpo, pienso si ahora, en este momento tu alma está aquí, si quiera un centímetro lejos de mí, si quiera diez… Ya no sientes… ¿o aún si? Tan cerca, tan lejos como la borrasca que arrastra mi alma. Tan cerca, tan lejos de aquel día soleado que por lo menos yo consigo recordar.

  “Por ti la vida entera” Joaquín Sabina Por ti un cielo azul En la cúspide de enero, Una sonrisa eterna Bajo la nube del cementerio Un beso pequeñito Cuando se vuelve tu madre. Por ti la vida entera Por ti una tarta rosa En el aniversario de tu muerte Una vela apagada Por aquel día en que te fuiste Un cántico alegre Hoy, que ya me olvidaste. Por ti la vida entera Por ti estos versos vivos Jornada en la que me muero.                           2-Mayo-1997  

  1997 05 02   Soñando despierto recordé una alcoba medieval con divina dama que a lo lejos mandábame besos puros; como los ángeles del cielo volando, se acercaban para purificar mi cara cansada y triste después de batallar en la guerra cruel e injusta de la vida… que hoy, despierto; me tocó vivir.